Río de Janeiro, es una de las ciudades más visitadas por turistas anualmente. Y no es de extrañar, puesto a que es un destino con múltiples eventos culturales, increíbles playas, bahías y elevaciones en el terreno que conforman un verdadero espectáculo natural y urbano, lleno de cultura e historia.
Cidade maravilhosa
La calidad gastronómica de Río es inigualable, pues se alimenta tanto de la cocina portuguesa como de las influencias de las cocinas asiáticas y africanas. Uno de los platos más deliciosos es el Acarajé, una especie de bollo hecho con camarones, o la deliciosa feijoada, un plato típico preparado con carne estofada y porotos negros.
Brasil es el lugar perfecto para pedir caipirinhas. En definitiva, si estás controlando tu dieta ¡Cuidado con Río de Janeiro! Ya que su gastronomía es difícil de resistir.
En Río de Janeiro hay mucho que hacer y muchos lugares que visitar, pero el que es sin duda de obligada asistencia es el Cristo de Corcovado (o Cristo Redentor), que se alza con sus 38 metros de altura sobre la montaña del mismo nombre y, vigilando con ojo de halcón desde las nubes, cuida de la ciudad y protege a sus habitantes como el más fiel guardián.
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